Mantenimiento Integral

El agua de tu piscina se deteriora continuamente como consecuencia de la exposición a las condiciones ambientales y a la contaminación producida por los bañistas. Para contrarrestarlo, el agua de la piscina no sólo ha de estar desinfectada, sino que además debe ser DESINFECTANTE.

Una piscina que no reciba los cuidados sanitarios apropiados constituye serio peligro para la salud. Por eso se necesita controlar un gran número de parámetros físicos y químicos: rendimiento del equipo de filtración, adaptación del tiempo de filtración a la temperatura del agua y características particulares de cada instalación, limpieza periódica del vaso, pH, alcalinidad y dureza del agua, prevención algicida… No basta con añadir cloro al agua de forma incontrolada. Al contrario, un agua que no esté equilibrada o sometida a una filtración adecuada y permanente, por muy alto que mantenga el nivel de desinfectante no resultará higiénica y además puede provocar importantes trastornos sobre la piel, ojos y mucosas.

• Reparación de grietas o fisuras
• Mantenimiento de la depuradora
• Reparación de los sistemas de filtrado
• Revisión de los niveles de cloro y pH
• Limpieza  de la cubierta de piscina
• Programación del equipo de filtración
• Limpieza del cesto de la bomba
• Reparación de pérdidas de agua